Foto: El País
¡Desinfecta la silla de ruedas! Éstas y otras ayudas técnicas son sinónimo de independencia para las personas con discapacidad, con ellas compartimos millones de historias, hacemos vida y pasamos la mayor parte de nuestro tiempo, siendo muchas veces desagradecidos por no desinfectarlas y limpiarlas regularmente.
Con el uso que se les da día a día y sin tener un buen plan de mantenimiento o limpieza, las sillas de ruedas y las ayudas técnicas pueden convertirse en un importante semillero de gérmenes y virus.
Estos gérmenes e incluso el actual coronavirus Covid-19, pueden hacer de ellas, un problema de salud serio para todos sus usuarios.
De aquí la relevancia y el llamado a dedicar parte de nuestro tiempo al mantenimiento, limpieza y desinfección de estas ayudas técnicas que nos brindan a menudo mayor autonomía y libertad.
¿Dónde se alojan los gérmenes en la silla de ruedas?
- Puño de empuje: son uno de los principales focos de infección de la silla de ruedas. Son utilizados por diferentes manos para empujar a las personas que van en la silla, lo que los hace ser una parte de fácil acceso a gérmenes y virus, clave a la hora de transmitir contagios. Es imprescindible limpiarlos.
- Espaldar: es el lugar donde reposamos nuestra espalda. Por lo general, la parte interna del espaldar hace contacto constantemente con la espalda, la parte externa siempre queda expuesta para que cualquier persona pueda tocarlo y de esta forma contagiarlo con algunos gérmenes o virus.
Esto sin mencionar que muchos usuarios apoyan sus manos, muchas veces sucia, en esta zona para hacer alguna transferencia. - Reposabrazos: como su nombre lo dice, esta parte de la silla sirve para dar descanso a los miembros superiores, por lo que constantemente nuestros brazos y manos están en contacto con ellos. Esto hace que los gérmenes o virus que podamos tener en nuestra manos queden en ellos constantemente.
- Cojín antiescaras o del asiento: esta parte siempre está en contacto con los glúteos y piernas de las personas, es muy fácil transferir gérmenes o virus si hemos abandonado la silla de ruedas en algún momento, debido alguna transferencia hecha a otra superficie; bien sea bancos públicos, colchonetas en gimnasios, algún sofá, etc..
- Neumáticos: estos tocan constantemente el suelo y están en contacto directo con un entorno que por lo general se encuentra sucio. Es por eso que es recomendable lavarlos frecuentemente con agua y jabón o, desinfectarlos con alcohol +75%.
Algunas recomendaciones a la hora de limpiar y desinfectar la silla de ruedas
- Haz una limpieza sencilla y esteriliza después de haber estado en lugares públicos.
- Primero limpiaremos el cojín de la silla con mucho cuidado, ya que son esenciales para prevenir escaras. Algunas sillas de ruedas tienen el cojín removible, sólo tenemos que quitarlo y meterlo a lavar en la lavadora en ciclo delicado y con detergente suave.
- Limpia las ruedas con un cepillo quitándoles el polvo y la suciedad.
- Quita el forro del espaldar si es de tela y mételo en ciclo delicado con detergente suave en la lavadora. La parte plástica, aluminio u otro material sólido, límpialo con un paño húmedo o incluso con gel antibacterial.
- Presta especial atención a los reposabrazos, estos están en contacto frecuente con tus manos y puedes estar transfiriendo gérmenes desde el aro de propulsión y neumáticos.
- Limpia el chasis con un paño húmedo e incluso con gel antibacterial.
- Limpia los aros de propulsión y joystick en caso de sillas de ruedas electrónicas.
En caso de otro tipo de ayudas técnicas, debes tener en cuenta las mismas recomendaciones y desinfectar las partes con las que tienen contacto frecuentemente y aquellos lugares de fácil acceso para otras personas, sobre todo cuando se hace uso en lugares con público.
¿Qué productos debemos usar para limpiar y desinfectar la silla de ruedas?
Gel desinfectante y sino si tienes, utiliza agua y jabón. Evita usar productos abrasivos que rayen o arruinen el acabado de la silla o la ayuda técnica.
En la mayoría de los manuales de sillas de ruedas se recomienda que tanto las estructuras como los tapizados, sean limpiados regularmente para alargar la vida de las sillas de ruedas y, en la actualidad, para evitar el contagio del Covid-19.